Nomeolvides de Sienna Anderson

Una noche de verano, Isabella Carmichael fue secuestrada. Tres meses más tarde, una familia la encontró inconsciente en un bosque que rodeaba al lago Big Bear, en California. Después de ser llevada de urgencia al hospital, Isabella recupera el conocimiento, pero no la memoria; no recuerda nada de sus meses en cautiverio ni de su captor.Cuatro años más tarde, una serie de asesinatos se suceden en la tranquila ciudad de Fresno. Isabella ha cambiado de domicilio y de nombre, y sigue sin recordar. Sin embargo, el asesino parece dispuesto a que ella no lo olvide: las víctimas se le parecen sorprendentemente y se empeña en imitar la escena de su secuestro.Matthew Lawson está a cargo del caso y es quien relaciona los asesinatos y el secuestro de Isabella. Entonces, decide buscarla y convencerla de que debe ayudar con la investigación. A pesar de que el primer contacto entre ambos –un simple apretón de manos– es tan intenso como un rayo, Isabella se niega de plano a colaborar. Pero cuando el criminal logra entrar a su casa para dejarle un mensaje, Isabella correrá a los brazos del detective Lawson para pedir ayuda. Matthew, que sabe que no es conveniente involucrarse sentimentalmente con Isabella, no ve otro camino que llevarla a vivir con él para protegerla. Allí, el deseo luchará con el deber y terminará por imponerse.El asesino, por su parte, va cerrando el círculo sobre ella: le deja mensajes a través de sus víctimas y ataca a sus amigas. Su furia se desatará, sin embargo, cuando compruebe lo que sucede entre Isabella y Matthew. Y será el detective el que se dará cuenta de que no está involucrado en un caso común, sino que debe salvar a la mujer que ama.

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La historia me atrapó desde el inicio, lo que fue un muy buen augurio. Todo comienza con la presentación de Isabella, una chica que fue secuestrada y que al lograr escapar, es encontrada por una familia que la lleva de inmediato a un hospital. Y para la completa sorpresa de la protagonista, su cautiverio ha durado muchos más días de los que cree y por si fuera poco, no recuerda absolutamente nada, un dato que es muy importante...

Años después, cuando ya Isabella se ha cambiado el nombre, una ola de asesinatos con el mismo modus operandi, obligan a Matthew (el guapísimo detective), a buscar a la mujer que ha inspirado al asesino de las flores, que no es otra más que Isabella.

Al principio, ella no está de acuerdo en cooperar en la investigación, pues como dije antes no recuerda nada y prefiere no hacerlo. Pero entonces, el asesino se acerca peligrosamente a Bella y es ahí cuando por fin, nuestra protagonista se queda al cuidado de Matt.

Adoré a esta parejita, me encantó ese estira y afloja, esa manera de Matt de contenerse, aunque he de decir que me frustraba ver que se detenía siempre en el mejor momento.

Los secundarios fueron increíbles y espero que la detective Susan tenga una novela, por que se me hizo un personaje que tiene muchísimo para dar.

Y al final he decir que el asesino me tuvo en vilo… no estaba segura de cuál de los dos chicos era, ¿el periodista o el amigo? Y así me la pasé, entre uno y otro, hasta el momento en que por fin conocemos su identidad. Por dios que este hombre tenía una mente demasiado retorcida y lo odié hasta el final del libro.

La novela me fascinó por que el romance es perfecto, los personajes fueron bastante verosímiles y las descripciones fueron excelentes, que era casi como estar ahí (como en la del laberinto XD).

Es una verdadera pena que en México no tengamos este libro impreso, pero si alguna lo quiere adquirir en digital, será una compra estupenda, se los aseguro.

398 pp. 2008. Editorial Vestales
Puntuación 5/5 | Goodreads +18