Cuando Katrina descubre a un hombre sin hogar durmiendo en el callejón detrás de la cafetería de su abuela, decide dejarle una taza de café, una bolsa de granos de café cubiertos de chocolate, y algunos pasteles para ayudarse. Poco sabe ella que ese acto de bondad, está apunto de poner su vida patas arriba. Debido a que ese adorable vagabundo, Malcom, es un ángel de la guarda que está en un descanso entre misiones. Y no se irá hasta que pueda recompensar la desinteresada ayuda de Katrina, cumpliéndole su más profundo deseo. Ahora bien, si sólo ella pudiera decidir lo que desea.
Traducción The Itzel Library
Debo decir que cuando comencé a leer esta novela, me gustó. Katrina se me hizo un personaje muy inmaduro, pero buena onda, humilde, aunque ciertamente no tenía muchos amigos :/ Ayudaba a su abuela en la cafetería, que era su vida.
Entonces sucede el encuentro con un hombre extraño, que va vestido con un kilt escocés y ahí dije “Oh dios! Que no comiencen a hablar de las highlands porque quienes me leen, saben que paso de los libros de escoceses. ” Por fortuna no fue así, el mensajero sólo vestía raro (?).
Después de que Malcom intentara por todos los medios pagarle la buena acción a Katrina, que le había regalado unos pastelitos, dulces y café, y que consiguiera que todo se moviera de un modo divertido que no les contaré para no arruinar la historia, me empecé a interesar más y más por lo que sucedía, que ya no quería soltar el libro para nada.
Si bien el comienzo fue lentón, se desarrolla con prontitud conforme avanza la historia y pronto te ves envuelta en tremendos líos, y terminas adorando a Ratcatcher (el gato), si es que te gustan los gatos. Malcom (el mensajero-ángel-chico-raro) era interesante y me encantó la relación que se da entre él y Katrina, de principio a fin.
Yo estaba feliz, por que sentía que la novela se llevaría una excelente calificación, pero entonces, leo las últimas páginas y kaput!
Lo primero que me pregunté fue ¿Le faltan páginas al libro? Pero no, no le hacían falta páginas, ese era el final.
¡Horrible!
Un final cortadísimo.
Es como ir en una autopista a doscientos kilómetros por hora y estamparte contra una pared que apareció de la nada. Pésimo final, demasiado abierto.
Yo creo que como lo importante es la lección que Katrina aprende, el final fue descuidado. Por lo que a mí respecta, este libro se lleva un 3 por ese final, pésimo, pésimo.
Ya he leído un par de reseñas negativas sobre este libro, así que no estoy muy segura. Si llega de alguna forma a mis manos lo leeré pero no estaré corriendo a la libreria para comprarlo :P
ResponderEliminarSaludos!